Tras llegar a Melbourne con la esperanza de que se le concediera permiso para competir en el Abierto de Australia con una exención médica de vacunación contra el coronavirus, el tenista serbio Novak Djokovic se consiguió con una negativa para su entrada al país.
Horas después de que el número 1 del ‘ranking’ de la ATP aterrizara en el aeropuerto de Melbourne, la noche del miércoles, la Fuerza Fronteriza de Australia comunicó que la estrella serbia “no había presentado las pruebas apropiadas para cumplir los requisitos de entrada” en ese país, por lo que “su visado ha sido cancelado”.
“Los no ciudadanos que no tengan un visado válido a la entrada, o aquellos a los que se les haya cancelado el visado, serán detenidos y expulsados de Australia”, reza el comunicado.
El equipo legal de Djokovic impugnará la decisión. En caso de fracasar, la estrella serbia, de 34 años, se verá obligado a abandonar el país.
Redacción e imagen RT